Esta ducha no es de lluvia, ni tan tecnológica como la que vimos de Fima. Recibió el nombre de Liquid Sunshine, y va destinada a personas con riesgo de padecer un trastorno afectivo estacional (TAE). Ese trastorno es común en lugares de mayor latitud, con inviernos prolongados y de pocas horas de luz diurna. Hay estudios que demuestran que la luz de gama completa es efectiva en su tratamiento. Por eso la ducha Liquid Sunshine tiene incorporado en su diseño una luz LED de longitud de onda azul, que sirve de terapia para este padecimiento.
El diseño es de Joseph Henney, y puede ayudar a reducir la depresión que provoca el TAE, simplemente tomando cada mañana una luminosa ducha terapéutica. La ducha no necesita instalación eléctrica ya que es la presión del agua la que hace que la luz se encienda, como ocurre con cualquier ducha con led.