Utilizar la piedra como material base para una lampara colgante no parece ser la mejor de las ideas. Pero si decimos que en la lámpara Aso San lo que se ha empleado ha sido piedra volcánica, la cosa cambia. Es un material ligero y bastante poroso. El nombre se ha elegido en honor al volcán activo más grande de Japón (Monte Aso).
Su elegante forma se ha conseguido a partir de un bloque de lava basáltica. Pero aún así es muy complicado de fabricar, porque es un trabajo que requiere mucha destreza y oficio. Es difícil conseguir que la pantalla de esta maravillosa lámpara sea tan delgada, pues incluso deja pasar la luz por muchos de sus poros. Impresionante!
El artista que ha hecho este diseño posible se llama Daniel Stoller.