El Edificio Sidera, sede de CIA Conad, se ubica en las afueras de la ciudad de Forlì (Italia). Está dentro de una zona industrial próxima a la antigua centuriación romana. Este moderno edificio de oficinas destaca por sus características arquitectónicas y funcionales, reflejando la racionalidad y el pragmatismo de la cooperativa que alberga.
Diseño arquitectónico y estructural
El edificio se desarrolla horizontalmente a lo largo de 100 metros y se eleva a una altura de 33 metros. La estructura, predominantemente de hormigón armado, presenta un núcleo central de escaleras y dos escaleras adicionales en los extremos. El nivel semisótano está destinado a parking y cuenta con cubiertas ajardinadas, al igual que la azotea del edificio. Este detalle hace que la vegetación se integre en un entorno industrial.
Materiales y estética
La fachada del edificio utiliza aluminio y vidrio, materiales que no solo contribuyen a su estética moderna sino que también permiten la entrada de luz natural. El aluminio refleja la luz de manera elegante, creando diferentes matices de color durante el día, según las condiciones climáticas. Las aletas verticales de protección solar, junto con la fachada de vidrio, crean un efecto óptico que hace que el edificio parezca opaco o transparente dependiendo del ángulo de visión.
Neuroarquitectura y ambiente de Trabajo
En el interior, el diseño sigue los preceptos de la neuroarquitectura, buscando crear un ambiente de trabajo óptimo. La luz natural inunda los espacios de trabajo, controlada por la piel de cristal que cubre el edificio. Un detalle importante es que las luminarias están calibradas para seguir el ritmo circadiano de 24 horas. Y el sistema de ventilación garantiza un aire interior limpio y saludable, a pesar de estar en una de las zonas más contaminadas de Europa. La ausencia de ventanas practicables y el control del aislamiento acústico contribuyen a un entorno de trabajo de alto bienestar psicofísico.
Bloque de oficinas con cubierta inclinada y fachadas plisadas
Espacios interiores y funcionalidad
El diseño interior es funcional y estético. Las oficinas están compartimentadas en espacios accesibles desde un pasillo central, cuya disposición varía en cada planta. Este pasillo se forma según una sucesión de líneas quebradas (ver planos). La escalera central abarca toda la altura del edificio, desde el semisótano hasta un lucernario en la cubierta. Aquí es importante señalar que esta escalera es un elemento espectacular del diseño del edificio Sidera. Gran parte del mobiliario se ha creado específicamente para este proyecto, y en material corian. Y como no podía ser menos, se ha hecho manteniendo la estética moderna de todo el conjunto.
Opinión Personal sobre el Edificio Sidera
A pesar de sus muchas virtudes arquitectónicas, el edificio Sidera carece de estrategias sostenibles significativas. Aunque cuenta con cubiertas ajardinadas, la fachada de vidrio y las aletas de aluminio no responden a un propósito de comportamiento solar pasivo. Es evidente que están ahí por razones estéticas. Sin embargo, el edificio logra combinar belleza y funcionalidad, mejorando el entorno industrial en el que se encuentra. Y lo mejor de todo es que proporciona un ambiente de trabajo agradable y eficiente.
Conclusiones
En conclusión, el Edificio Sidera es un ejemplo destacado de la arquitectura contemporánea, que equilibra estética y funcionalidad. Además aplica principios de neuroarquitectura para crear un buen ambiente de trabajo. A pesar de la falta de estrategias sostenibles más avanzadas, su diseño y ejecución están a un alto nivel, pues crea espacios de trabajo que promueven el bienestar.
Imágenes del sitio web de tissellistudio architetti, autores del proyecto.
