Este mueble surgió a partir de una investigación que exploraba las diferentes posturas que una persona puede adoptar en un sofá, mientras lee, habla por teléfono, ve la televisión… Las conclusiones de ese análisis indicaron que el grado de confort está estrechamente relacionado con el cambio de postura. También señaló que las preferidas eran estar echado de espaldas, o sobre el estómago. Esto puso de manifiesto que el sofá convencional no es perfecto, y que tal vez habría que ir a soluciones más innovadoras. Así surgió la moderna tumbona Lullock.
Es un extraño sillón que responde ante el movimiento natural del usuario. Su estructura tiene forma de arco, pues está diseñada para rotar y adoptar posiciones diferentes; pero ahí no acaba la cosa, porque viene acompañado por un conjunto de mullidas esferas (con forma de seta). Están hechas de un material ligero y suave, que se adapta a la forma del cuerpo, aumentando la sensación de confort.
La parte más divertida y original empieza cuando el arco cambia de posición. Eso ocurre cuando el usuario desplaza su peso al modificar su postura. Y es que la moderna tumbona Lullock está hecha para descansar boca arriba o boca abajo, pues ella simplemente se adapta a nuestra posición. Eso ayuda a aliviar el estrés y a mejorar nuestro riego sanguíneo. Éste es un factor saludable muy a tener en cuenta, si vamos a relajarnos por periodos más prolongados de tiempo
Si aún no has entendido muy bien la utilidad de este mueble, te recomendamos ver el siguiente vídeo.
Para crear la moderna tumbona Lullock participaron los siguientes diseñadores: Nicole Hone, Reuben Knauf, Darnar Kruy, Nisha Brunt y James Edwards. Todos ellos estudiantes de la Universidad Victoria en Wellington (Nueva Zelanda).