Evergrande Tower es un rascacielos para el centro de negocios de Jinán, la capital de la provincia china de Shandong. Con sus 560 metros de altura aspira a convertirse en el segundo edificio más alto de aquel país asiático, justo por detrás de la Torre Shanghai.
Esta torre se utilizará para oficinas y apartamentos principalmente. Aunque también contará con espacios para el ocio y el entretenimiento, así como una zona comercial. Su presupuesto está fijado en unos 25 millones de yuanes, que vienen a ser poco más de 3 millones de euros. Y según cuentan, vendrá con lo último en estrategias sostenibles.
Este rascacielos fue diseñado por la firma de arquitectura Terry Farrell + Partners.
