
No se trata de una obra incompleta, ni de un fake, ni mucho menos de una broma… bueno sí, porque la única ventana que tiene arriba en su fachada, no da a ninguna habitación!! Se trata de la Casa Minamimachi 3 (Hiroshima, Japón), todo un atrevimiento con un resultado más que espectacular.

La escena ideal que todo arquitecto desea es poder construir en un terreno amplio, y de manera aislada, en esa situación casi siempre las limitaciones las pone el cliente, pero cuando se trata de una casa entre medianeras, la cosa es bien distinta. La propia presencia de las construcciones vecinas, la ausencia de panorámicas atractivas -casi siempre-, el reducido tamaño del solar…, estos condicionantes son grandes, y casi siempre empeoran por las imposiciones municipales.
La solución planteada aquí no es otra que la de ‘mirar al cielo’ y olvidarse de las ventanas en la única fachada posible, que por cierto tampoco aporta grandes vistas. La genial idea de crear una caja perimetral con muros de hormigón armado, permite no tener que emplear ningún soporte en el interior, pues los diferentes forjados ‘descansan’ sobre vigas que van de un muro al opuesto. (sigue más abajo)



La luz y ventilación de todo el interior de la casa se resuelve girando su planta con la intención de tener cuatro huecos triangulares de ventilación/iluminación, uno en cada esquina. Con el propósito de que luz cenital llegue a los pisos inferiores, en esos patios se han utilizado unos paneles de metal deploye, y en cada una de las habitaciones se han dispuesto grandes ventanas correderas. Se consigue de esta manera unos espacios luminosos y bien ventilados, que acompañados de un buen uso de la madera en las carpinterías y muebles, hacen de este proyecto una obra de especial relevancia. Lástima que la fachada se haya dejado con ese aspecto tan inacabado.

Es un proyecto de Suppose Design Office. Visto en dezeen.