En una parcela de Kojetin (República Checa), se quería reconstruir una antigua granja. Tenía que servir para funcionar como lugar habitable, donde se pudiera además trabajar. La granja original era de 1862, y de ella apenas quedaban los muros de piedra. Por eso los arquitectos creyeron más conveniente hacer una intervención romántica. Es. decir, que utilizaron los muros como apoyo perimetral de la cubierta inclinada principal de la intervención. Y dentro crearon la ‘caja’ que serviría de vivienda.
Esta nueva caja no ocupa toda la superficie, pues deja un espacio que sirve de terraza cubierta, volando una parte hacia el sur para que quede soleada. El interior está presidido por un gran espacio, acristalado hacia el sur y el oeste (entrada), que sirve de cocina-comedor y salón. Al fondo se deja una pequeña habitación para trabajar y dormir, más un aseo.
Las cargas de la ligera cubierta de madera se recogen con una estructura metálica. Para ello se ha colocado un elemento de apoyo de hormigón, en la coronación de los muros de piedra. Toda la carpintería (aluminio) es de doble acristalamiento, mientras que el resto de los cerramientos están hechos con cemento cetris.
Es un trabajo de los arquitectos Kamil Mrva, con fotografías del estudio Toast.