Un lavabo puede atraer nuestra mirada por tener un diseño elegante o atrevido, pero también porque resuelva algún elemento de una manera novedosa. Este modelo de la firma Giquadro cumple con todas esas condiciones para atrapar nuestra atención, porque a su diseño de cuenca esférica rematada con unos límites rectos, se le ha añadido la novedad de no dejar a la vista su desagüe.
En estos lavabos de Giquadro el drenaje se resuelve por el perímetro de una pieza circular situada en su fondo, está ahí, pero no se ve el típico agujero de salida. Viene en ocho tamaños diferentes, ya sea sencillo o doble, y están fabricados en piedra tallada de granito negro, cuarzo composite blanco, o piedra azul belga.
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