La Silla Green nació con la idea de aportar un diseño agradable, sostenible, que se ajustara a bajos presupuestos. Por su forma poligonal y acabado, seguramente no es el modelo de silla a elegir para ambientes muy exigentes con lo estético, pero cumple su cometido para el resto de situaciones.
Este mueble destaca porque su asiento está hecho con plástico 100% reciclado, en un color gris oscuro ligeramente moteado, lo que hace que cada silla sea diferente al resto, y cumple con los requisitos ergonómicos más básicos. La textura está suavizada con un grabado en alto relieve, que contrasta con la que tiene en su lado trasero. Las patas de la Silla Green pueden ser de madera o metálicas pintadas.
Imágenes del sitio web de Estudio Mariscal.