Este artículo trata sobre una reforma practicada a un apartamento de apenas 50m2, en dos niveles, y con una altura libre de 3,70m en la habitación principal. La idea de partida era ajustarse a una distribución abierta, evitando cerrar un espacio para el dormitorio en tan limitado espacio.
Esta situación se resolvió suspendiendo un cubo blanco en el centro del apartamento. Debajo de él queda espacio con altura útil suficiente, permitiendo circulación a ambos lados. El dormitorio que ahí se crea se deja totalmente abierto por su entrada, necesario para su ventilación. Este elemento a su vez crea profundidad al nivel superior de la vivienda.
Es sin duda una inteligente solución para un problema de espacio y técnico, pero resuelta con maestría. La habitación se ha creado a partir de una estructura metálica colgada con perfiles de 40 x 40mm, y paneles de madera. Sus paredes, piso, y techo se han pintado luego con una resina de poliuretano.
Es un trabajo de los arquitectos franceses Emmanuel Combarel Dominique Marrec (ECDM).