La marca Kwikset produce una cerradura inteligente que controla la seguridad del hogar, y que se maneja mediante una pantalla táctil o un smartphone. El sistema permite abrir la puerta simplemente introduciendo el código de acceso en su panel con LED, o acercando nuestro teléfono móvil a la cerradura, pues utiliza una conexión inalámbrica Z-Wave.
Ingenioso método de crear una puerta, con las ventajas de una puerta corredera, pero sin guías, empleando paneles que pueden rotar a partir de un vértice. Tiene la ventaja de que no se necesitan guías por las que deslizar el panel, pero en cambio es menos seguro frente a un empuje perpendicular a la hoja. Este sistema ha sido ideado por Clemens Torggler.