Aquí lo trataremos como un apartamento, pero sus 20m2 lo convierten más bien en un refugio urbano (ubicado en Madrid). Por sus proporciones se ha organizado de una manera muy peculiar, motivo por el cual no debe extrañarnos que se explique mejor con un plano de sección que con un plano de planta. Se le conoce como Apartamento 100m3, porque ese es el volumen que tiene. Es estrecho y de techos muy altos, una característica que se aprovechó para distribuir las diferentes funciones en plataformas a diferentes alturas.
Este lugar tan peculiar está diseñado para una única persona, que utilizará su energía y creatividad para vivirlo en las diferentes situaciones cotidianas. Todas las estancias están conectadas visualmente, hasta el cuarto de baño, sin puerta intermedia entre ellas. Los desniveles están tan bien definidos que son suficientes para percibir que se ha cambiado de «habitación» al pasar de la cocina al dormitorio, por ejemplo.
Descripción
La puerta de entrada está a una cota diferente del resto. De ahí se sube un par de escalones hasta la cocina, que es zona de paso obligado para llegar a la sala. Esta parte de la casa es la que tiene el techo más alto. Bajo ella esconde un gran espacio de almacenamiento, accesible a través de una trampilla situada en el piso de madera. Al fondo se baja al dormitorio, que dispone de un armario lateral para colgar toda la ropa. Al nivel que queda encima del dormitorio se sube por una escalerilla que hay en la pared. Es un espacio de trabajo que recibe gran cantidad de luz natural (y ventilación) procedente de un lucernario.
El cuarto de baño está ubicado justo debajo de la cocina, y tiene una bañera realizada in situ. No se llega a ver en ninguna de las fotos qué hay detrás del muro sobre el que están empotrados el lavabo y el inodoro, suponemos que se trata de más espacio de almacenamiento.
Este interesante apartamento fue proyectado por los arquitectos de MYCC: Carmina Casajuana, Beatriz G. Casares, y Marcos González.