No es muy normal que una obra para un importante evento se termine antes de lo previsto. Y menos aún que lo haga con un 3% menos de dinero de su presupuesto inicial. Eso ocurrió con el Estadio das Dunas, construido en la ciudad brasileña de Natal. Era una de las sedes del Campeonato Mundial de Fútbol 2014.
El también llamado Arenas das Dunas se construyó dentro de un parque, con una capacidad para 42.000 espectadores. Su fachada es bastante singular pues se curva para formar la cubierta, con 20 módulos ligeramente separados entre sí, con el fin de permitir el paso de las escaleras entre ellos. Es por tanto un estadio en el que la circulación de los espectadores se realiza en el exterior del mismo, en una plataforma elevada perimetral.
Su estructura de acero está recubierta con paneles de aluminio y membranas tensadas de PVC, así como policarbonato translúcido. De sus características sostenibles destaca su instalación para la recogida y almacenamiento de las aguas pluviales, con capacidad para 3 mil metros cúbicos.
El campo de fútbol Estadio das Dunas, que también se utilizará para otros eventos, lo diseñó Populous.