Esta casa está situada en una de esas parcelas que ningún arquitecto querría construir, y eso que tiene 428m2. Pero la pendiente y geometría de las calles hacen de este triángulo inclinado un lugar complicado para empezar a plantear cualquier proyecto. Esta vivienda en ladera está situada en la ciudad de Nagoya (Japón), y se la conoce por Bird House.
Una vez obtenidos los datos pertinentes sobre la calidad del suelo, los arquitectos decidieron no alterar la pendiente natural de la parcela. Plantearon una cimentación segura con zapatas aisladas, a juzgar por lo que se ve en la sección (más abajo). La vivienda tiene una superficie construida de 114m2, repartida en tres cuerpos que se encuentran siguiendo un sendero-rampa de hormigón en zigzag. El segundo está aislado, es una habitación anexa (tatami) con un porche delantero.
Es interesante ver en los planos de planta la escalera que conecta el cuerpo inferior con el superior, donde están el salón, cocina y resto de habitaciones. La estructura es íntegra de madera, se ha dejado bastante vista, y la acompañan el suelo y otros revestimientos.
La Bird House es un proyecto del estudio japonés Katsuhiro Miyamoto & Associates.