A casi todo el mundo que ve la Battersea Power Station de Londres, se le viene a la mente la portada del disco de Pink Floyd (Animals – 1977). Ese famoso cerdo volando entre sus chimeneas se convirtió en una manzana mordida, cuando Apple se hizo con el 40% de las oficinas de un complejo mixto que se construirá allí. Los terrenos alrededor de la estación Battersea son objeto de una gran actuación urbana.
Oficinas de Apple en la remodelación de la estación Battersea
Battersea fue una estación termoeléctrica que empezó a construirse en 1939. En ella se utilizaba carbón para producir electricidad, hasta 1983, fecha en la que se cerró. Desde entonces ha tenido varios intentos de reactivación, pero como parque temático o para funcionar como hotel y complejo residencial. Lo que poca gente sabe es que se trata del edificio más grande de Europa construido con ladrillo.
La rehabilitación de Battersea forma parte de un plan urbanístico que ordena todo ese sector de la ciudad, a completar en 7 fases. Ello supone una inversión de 16.500 millones de dólares para construir nuevos edificios con viviendas de lujo, oficinas, hoteles, espacios públicos ajardinados, y azoteas verdes.
Apple será el inquilino de honor de las nuevas oficinas, después de que se remodelen por 8.800 millones. Estarán ubicadas en las antiguas calderas de la estación, y ocuparán 4,65 hectáreas. Se reparten en seis pisos, que serán utilizados por los 1.400 empleados de Apple que trabajan en la capital británica. Según se puede ver en los renders, se mantendrá un estilo industrial en el que no faltará el ladrillo visto. La entrada de Apple se hace por un atrio de hormigón, donde hay unos ascensores de vidrio. Uno de ellos circula dentro de una de las grandes chimeneas de la estación, hasta un mirador superior.
Se sabe que además de oficinas, la nueva estación Battersea dispondrá de tiendas, auditorio (2.000 butacas), y salas para eventos.
Esta fase del proyecto (la 2ª) debe estar finalizada para el 2021. Pero antes veremos terminadas las fabulosas instalaciones del Campus 2 en Cupertino (California).
El desarrollo de la estación Battersea lo promueve y diseña una compañía malaya llamada WilkinsonEyre.