Kaohsiung es la segunda ciudad más grande Taiwán, con una población de casi 3 millones. Cuenta con anchas calles y avenidas, una fuerte industria metalúrgica, y el puerto más importante del país. Éste es el entorno de Blue and Glue, un piso reformado para una joven pareja, que deseaba espacios compatibles con la vida adulta y los juegos de sus dos hijas pequeñas.
Los clientes pidieron a los arquitectos que su nuevo apartamento tuviera una cocina grande. Deseaban poder cocinar juntos, y mantener vigiladas a sus hijas. Por ese motivo se colocó toda la zona de vida en un gran espacio, que es visible desde el vestíbulo de entrada a la casa. Pero en esta sala se han diferenciado de una manera muy sutil cada una de las funciones. Se actuado tanto en el suelo como en el techo, poniendo dos niveles y modificando materiales y texturas. De esta manera, el área de la cocina y comedor queda un escalón más bajo que la sala de estar; pero la altura libre de suelo a techo prácticamente se mantiene igual en ambas, porque el techo de la cocina-comedor es más bajo, para meter dentro los conductos de climatización.
En el espacio más elevado de la sala se diferencian otras dos zonas. Una de ellas está vinculada a la pantalla de televisión; tiene alfombra, sofá acolchado y gran sillón, una mesa baja y pequeños pufs circulares. Detrás del sofá, y con el techo de vigas de madera, se ha definido un espacio para que las niñas lean y pinten. Lo podrán hacer en una pared de pizarra, o sobre un tablero que hay bajo la ventana del fondo de la sala.
Más detalles del piso Blue and Glue
Al ocupar la esquina de un edificio alto, desde el salón hay unas buenas vistas a la ciudad. Esta circunstancia se aprovechó para acondicionar la gran ventana horizontal como una zona de lectura. Por eso se colocó un ancho marco de madera en todo su perímetro interior. En este espacio se han combinado con gran maestría tonos de azul, gris, y madera; incluso en la parte de la cocina, donde nos ha llamado mucho la atención el tablero para comer, que está unido al mueble-isla. Otro detalle interesante en la decoración de este piso reformado: la puerta que da acceso a la terraza (ver plano). Está integrada con el resto de muebles de la cocina, dejando en realidad una doble puerta hacia dicha terraza.
El dormitorio de los padres está compuesto por una sucesión de espacios. Hay habitación para las camas, ropero, y cuarto de baño. Las hijas comparten dormitorio y un baño independiente. Tienen la puerta de la habitación decorada, así como unas puertas con huecos a repisas en sus armarios.
Los arquitectos realizaron un gran trabajo con este piso reformado. Emplearon una decoración sencilla pero muy efectista, y con una organización acorde a lo que deseaba el cliente. La única parte que platea dudas está relacionada con el número y organización de los dormitorios, que está muy bien mientras las hijas son pequeñas, pero puede que no sea la más adecuada una vez crezcan.
Las fotos y plano de este piso reformado son del estudio HAO Design, encargado de realizar tal proyecto. Fotos realizadas por Hey!Cheese.