Silt Lake City es una extraña idea de ciudad flotante que se adapta a diferentes subidas y bajadas del nivel del agua. Esto le permite evitar inundaciones, y de paso mejorar las producciones agrícolas. Su diseño está específicamente adaptado al río Nilo, que poseía una larga franja verde y fértil muy vulnerable a las inundaciones. Todo eso fue antes de la construcción de la presa de Asuán; después sufrió ciertas consecuencias medioambientales considerables, como una sedimentación excesiva (aguas arriba), y demasiada erosión (aguas abajo).
Este modelo de ciudad está formado por estructuras flotantes modulares. Es una especie de hidrópolis que se aprovecha del descenso y subida de las aguas. Además de tener cultivos agrícolas, dispone de residencias, oficinas, y estaciones generadoras de energía. Pero eso sí, se trata de un diseño que va acompañado de un control riguroso del nivel de las aguas. Debe estar sincronizado con las épocas de cultivo, haciendo uso de un sistema hidrológico realmente complejo, que realiza el riego de los campos mediante una red de canales, diques, y válvulas.
El modelo urbanístico está definido por un dique en el perímetro que conecta con las redes de comunicación que unen con otros núcleos urbanos. Se organiza internamente mediante un eje fluvial que atraviesa un nodo circular, el cual funciona como un lago, con los edificios dispuestos formando un anillo.
El proyecto de esta original ciudad flotante fue ideado por los estudiantes Margaux Leycuras, Marion Ottmann, y Anne-Hina Mallette, de la Escuela de Arquitectura de Nantes.