Hay un grupo de gente empeñada en construir Floating City, la que será la primera ciudad flotante (seastead) del mundo. Está pensada para funcionar como una comunidad autosuficiente. Tendrá edificios residenciales, hotel/resort, oficinas dentro de un parque de negocios, comercios, etc. Además contará con instalaciones para la investigación, la acuicultura, planta energética, etc. Sus inversores se lo plantearon para que dicha ciudad tuviera incluso autonomía política, pero vinculada a un «país anfitrión».
Se trata de un proyecto de ciudad que está basado en un concepto muy específico, y que también presenta ciertas limitaciones. Arranca de la sensibilidad hacia el problema que generan los monopolios estatales, que no innovan lo suficiente, y que se rigen por sistemas políticos anticuados (concebidos en épocas muy diferentes a la actual). A los entusiastas de esta ciudad flotante se les conoce por «seasteaders«, y tienen la visión de una sociedad gobernada como si de una startup se tratara, con diferentes grupos innovando y compitiendo por servir mejor las necesidades de sus habitantes. Pero es muy complicado montar una pequeña sociedad de estas características dentro de un país, de ahí surge la necesidad de crear un lugar apartado para que se instalen allí los que deseen llevar a cabo este experimento, y no les importe poner como próxima frontera el océano.
Como se puede ver, todo esto está muy relacionado con el concepto de ciudad ideal, solo que en esta ocasión se quiere llevar a la práctica. Durante cinco años se estuvieron realizando estudios sobre el potencial de comunidades que floten en el mar. En la actualidad se están aplicando dichos conocimientos a un diseño específico, determinando las necesidades y deseos de posibles clientes. También se está trabajando en la selección de una ubicación para la primera Floating City, que será dentro de las aguas territoriales de algún país*.
Fase I de Floating City
Este ambicioso proyecto completó muchos de los objetivos de su Fase I, como son:
- Informe detallado (en inglés) que demuestra la viabilidad de la construcción de una ciudad flotante.
- Se creó una asociación entre los promotores del proyecto (Instituto Seasteading) y una firma holandesa de diseño urbano acuático (DeltaSync). Se consiguió más de 27.000$ en una campaña de crowdfungig para el diseño y cálculo preliminar del proyecto, resumidos en este PDF.
- También se estudió la alternativa de una ciudad semisumergible, pero se llegó a la conclusión que el concepto desarrollado por DeltaSync se adaptaba mejor a las exigencias de Floating City.
- Se están manteniendo contactos con los países de acogida candidatos, expresándoles todos los beneficios que obtendrían. Aquí se puede leer un documento que explica los criterios a considerar, y el método para elaborar esa lista de candidatos.
Queda aún pendiente la recopilación de datos para aquellos posibles residentes, y dueños de negocios, que quieran instalarse en la primera ciudad flotante del mundo, para lo que se ha creado una encuesta. Ya se han interesado personas procedentes de 67 países, la mitad de ellos de los USA.
La Fase II para la ciudad flotante
Llegados a este punto, los responsables del proyecto están convencidos que si esta ciudad crea nuevos puestos de trabajo para los residentes locales, el gobierno del país de acogida va a estar dispuesto a darles autonomía política en Floating City. Y es que todo indica que sí hay un mercado interesado en una ciudad flotante en la que se pueda vivir y hacer negocios, sin olvidarnos que también sería un atractivo turístico, además de contar con espacio para la investigación, y servir para vender energía y agua limpia a la nación anfitriona.
Ya se está trabajando en la elaboración del contrato legal que se le va a presentar al país de acogida. Una vez llegados a un acuerdo, entonces se revelaría la ubicación definitiva.
El tamaño de la primera seastead va a ser pequeño, habiéndose estimado su coste en unos 167 millones de dólares. Estará formada por al menos 10 plataformas (posiblemente pentágonos) de hormigón, las cuales estarán como máximo ocupadas en un 80% por edificios de poca altura (no más de 3 pisos). Cada uno de sus módulos flotantes es susceptible de variar de orientación y posición dentro de la ciudad, y estarán alimentados por fuentes renovables de energía que hay en la propia Floating City, de tal manera que ninguno de esos módulos se conecta a tierra para conseguir servicios de agua, electricidad, alcantarillado, etc. Toda la ciudad está protegida de los fuertes oleajes, y preparada para soportar graves tormentas oceánicas.
Concurso del proyecto
Se anunciaron los diseños ganadores en el concurso para Floating City, que estuvo abierto a arquitectos, ingenieros, diseñadores, y estudiantes de todo el mundo. Hubo 2 proyectos que alcanzaron el primer puesto:
- Artisanopolis, de Gabriel Sheare, Luke & Lourdes Crowley, y Patrick White.
- Storm Makes Sense of Shelter, diseñado por Simon Nummy.
Detrás de esta ambiciosa iniciativa de ciudad flotante está el Instituto Seasteading, fundado en el 2008 por Patri Friedman. Este hombre es activista, ingeniero informático, y teórico en política económica. Es el nieto del novel de economía Milton Friedman. También está en el equipo Peter Thiel (inversor, filántropo, y cofundador de Paypal).
(*) Hay varios motivos para realizar esta primera ciudad flotante en las aguas de alguna nación existente. El principal es que es más barata la construcción en unas aguas tranquilas y poco profundas, que hacerlo en aguas internacionales; facilita el transporte de personas y mercancías; y también porque le proporcionaría un marco jurídico internacional existente. Por cierto, hemos visto la lista provisional de países anfitriones candidatos, y no hay ninguno europeo.
