En una árida finca del desierto de Sonora (Arizona) se encuentra la Casa Tucson Mountain. Este proyecto está cuidadosamente ubicado para minimizar el impacto ambiental. La casa nos gustó mucho cuando la analizamos, Tiene muros de tierra apisonada, una espectacular entrada con cubos de hormigón, y una escalera de caracol que es una auténtica obra de arte. Esta escalera sirve de acceso a una de sus azoteas, desde la que se ve una buena panorámica.
La citada escalera está en un hueco abierto por arriba, a modo de patio, que tiene drenaje de grava en el piso. Es accesible desde una pequeña habitación que se utiliza como estudio. El hueco está revestido con tableros de madera carbonizada shou-sugi-ban, esa vieja técnica japonesa para preservar la madera. La escalera está fabricada con peldaños de chapa de acero soldados a un tubo, con la peculiaridad de que a cada uno de ellos se le ha practicado un calado (en huella y tabica). La superficie perforada va aumentando en los escalones, según vamos subiendo, con la intención de garantizar el paso de la luz natural.
Esta sensacional escalera de caracol la diseñó Dust Architects. Su fabricación corrió a cargo de Parsons Steel Builders.