Esta mágica construcción es Ecolodge, y corresponde a un pequeño hotel en Siwa (Egipto). Es un remoto lugar en el desierto, dominado por un oasis en torno a un lago (Salt Lake). Se construyó conforme a la arquitectura del lugar, con materiales y sistemas constructivos autóctonos (barro, madera de palma, caña y piedra). Y fue diseñada hábilmente, siguiendo el ritmo de una arquitectura de patios, pérgolas, y torres.
Los muros se hicieron con un material tradicional local llamado kershef a base de barro, arena, y sal de las salinas cercanas, ocupando los 35 x 35 metros de toda la finca. Hay una torre central que contiene las dependencias de los dueños, y el resto se extiende en una única planta, ofreciendo fachadas diferentes en cada lado. Un salón principal en el norte está protegido del sol por una pérgola con vistas al lago de sal. En el lado Este están las habitaciones, tratadas como volúmenes independientes y creando salientes hacia el límite exterior. En el lado sur la fachada es más uniforme con mínimos huecos hacia el palmar, protegiéndose de los vientos de arena.
Hay un patio principal con una alberca alargada sobre el que circundan las áreas principales, que a su vez sirve para enfriar el aire hacia las habitaciones de huéspedes y las de la torre. Hay que aclarar que no hay energía eléctrica en el edificio, por eso en todos los muros se han dejado pequeñas hornacinas para poder ubicar velas. Tanto en el mobiliario, carpinterías, escaleras… se ha respetado al máximo los materiales locales.
Ecolodge es un proyecto del estudio parisino de Laetitia Delubac y Christian Félix. Fotografías de Laetitia Delubac.