Este proyecto ganó un concurso de ideas para el nuevo Museo Canoa Canadiense (Canadian Canoe Museum), a ubicarse en la esclusa Peterborough de Ontario. Sus instalaciones sirven para alojar la mayor colección del mundo de canoas y kayaks. Pero lo más destacable para nosotros es que contará con una azotea ajardinada que superará los 8 mil metros cuadrados de superficie.
El edificio tiene un presupuesto de $45 millones CAD (casi 30 millones de euros). Está concebido como un pabellón de una planta, que ofrece una larga fachada serpenteante de vidrio, y un espacio interior muy flexible, capaz de adaptarse a diferentes tipos de exposiciones. Se ha diseñado para que tenga unos bajos costes de funcionamiento, haciendo además uso de una calefacción/refrigeración por energía geotérmica.
En el acta del jurado se pudo leer:
Este proyecto merecía ganar por ejemplificar la levedad y funcionalidad sublime de la canoa, (…) ofreciendo un espacio suave, orgánico, que poéticamente serpentea a lo largo de la Trent-Severn. No importa donde se encuentre uno, dentro del museo o fuera en su azotea ajardinada, pues siempre será capaz de ver el agua, y una canoa que espera para ser remada. Este museo una vez construido va a cambiar la forma en la que pensamos acerca de la arquitectura, la creación de lugares, y de la canoa, será un verdadero icono.
En su primera fase, el concurso recibió de todo el mundo la inscripción de 97 propuestas, seleccionándose luego un reducido grupo de 5 ideas en su etapa final. Los trabajos de construcción se programaron para finales del 2017.
Este museo con azotea ajardinada es un proyecto del arquitecto Heneghan Peng, desarrollado en colaboración con la firma Kearns Mancini Architects.