Es normal que aquellos clientes que deseen vivir en una casa luminosa, utilicen el blanco para el color de sus paredes, pero puede ocurrir que se quiera ir más allá y hacer que ese sea el color dominante. Pure White es un ejemplo de ello, se trata de una vivienda unifamiliar situada en un acantilado de la Costa Tropical (Almuñécar, España) en la que se ha utilizado una decoración de interiores basada en el blanco.
Para conseguirlo, se buscaron muebles y objetos que estuvieran diseñados en blanco, y solo se admitieron determinados elementos en tonos grises o en negro. Ese ha sido por tanto el color que luce en los muebles de los espacios de vida de la casa y del área de servicio, con sofás, lámparas, alfombras, vajilla,… en color blanco. La suite principal está arriba (en un cubo) y ha sido decorada también en blanco, salvo la alfombra, algunos cojines, y ropa de la cama, que utiliza de nuevo el negro y los grises.
Las únicas partes decoradas añadiendo otros colores fueron la zona de los hijos (incluida la sala de juegos), y el cuarto de invitados. Aparte del interés que tiene esta casa por su decoración, también destaca por el estilo de su magnífica terraza, donde la madera toma cierto protagonismo.
Este trabajo de decoración de interiores ha sido realizado por el estudio de Susanna Cots.