Este post está dedicado a Affinity Chair, un experimento artístico que toma la silla como pretexto para expresarse. En este «mueble» la luz, ciertas propiedades de los materiales, y la tecnología, definen el objeto. Se trata además de una silla con la que el usuario puede interactuar. Cuando está sola, la silla Affinity puede parecer ‘invisible’; pero cuando nos situamos enfrente y nos acercamos a ella, se ilumina. Lo hace de manera intermitente, cada vez más rápido, hasta que nos tiene justo delante. (Ver vídeo).
Está fabricada con material acrílico, film espejo, tecnología LED, sensores de proximidad, y algo de código. No es una silla que se haya puesto a la venta aún, pero sí ha pasado por numerosas exposiciones a lo largo de su vida.
La Silla Affinity es un trabajo del diseñador Ben Alun-Jones. Fotos de Luke Bennett.