En el corazón del históricamente desatendido vecindario de Brighton Park (suroeste de Chicago) surgió una interesante arquitectura. Se trata de un edificio circular que alberga la sede del Distrito de Parques de Chicago (CPD). Incluye una casa de campo comunitaria, y establece un hito en diseño y funcionalidad.
Con un diámetro imponente de 78 metros, el edificio destaca por su forma icónica, que refleja la importancia de la institución cívica que alberga. Este edificio circular no solo tiene oficinas, sino que redefine el concepto de un espacio de trabajo. Lo hace conectando al personal del CPD con el público al que sirve. Hay dos patios interiores generosamente iluminados y aireados que crean espacios de reunión y relajación. Se hace incorporando la naturaleza al interior, y resaltando la relación entre el edificio y su entorno.
El uso inteligente de materiales locales es un sello distintivo de este edificio. Las paredes, hechas de bloques de hormigón y ladrillos comunes de Chicago, destacan por su tono rosado característico. Estos ladrillos, rescatados de edificios demolidos en la zona, no solo añaden un toque de autenticidad. También simbolizan la recuperación del sitio para la comunidad.
La sostenibilidad y la eficiencia son elementos clave en el diseño. Las fachadas perimetrales cuentan con cristales tintados en bronce y celosías arqueadas de aluminio anodizado. Se logra así una combinación visualmente atractiva y funcionalmente efectiva. Además, las cubiertas verdes contribuyen a mitigar el efecto isla de calor, un problema común en áreas urbanas densamente pobladas.
El interior del Distrito de Parques de Chicago no escatima en detalles. Las paredes de ladrillo visto y los suelos de terrazo crean un ambiente cálido y acogedor. Los muebles y revestimientos de fresno local añaden un toque natural, y honran los recursos locales promoviendo la sostenibilidad.
Con un parque
Este proyecto no se limita al edificio en sí, sino que se extiende al parque circundante. Con campos de fútbol, áreas verdes, parques infantiles, y fuentes de agua, este parque es un reclamo a la recreación y comunidad en un área que anteriormente carecía de estas instalaciones.
El impacto de este proyecto trasciende las paredes del edificio. Ha sido resultado de una intensa participación comunitaria, involucrando a vecinos, líderes locales, y padres de familia. Como resultado, edificio y parque se han convertido en un motivo de orgullo para una comunidad que históricamente se sintió desatendida.
El edificio circular del Distrito de Parques de Chicago es mucho más que una estructura arquitectónica. Es un testimonio de cómo el diseño innovador, la sostenibilidad, y la comunidad pueden unirse para crear un espacio que revitaliza una barriada.
El Distrito de Parques de Chicago fue diseñado por el estudio local John Ronan Architects. Fotos de James Florio.