Ya se presentó a las autoridades el proyecto para la construcción de H700, un rascacielos de 739 metros. Está destinado a convertirse en el edificio más alto de China. Se ubica en el distrito Luohu, un área financiera que funciona como puerta de entrada a Shenzhen, desde Hong Kong.
H700 Tower se convertiría en el edificio más alto de China
La parcela elegida se encuentra rodeada de proyectos con otros edificios de altura. Como era de esperar, este rascacielos es toda una expresión técnica para dicha región en desarrollo. La plaza adyacente proporciona un foco cultural para esa expansión de la ciudad. En ella se incluyen tiendas, centro cívico, y varias instalaciones institucionales.
Hay que reconocer que el perfil de esta torre es elegante. Su planta adquiere una geometría pseudo-triangular y, según comentan sus autores, su diseño se basa en tres componentes: forma, estructura, y jardines en coronación. Estos tres elementos están concebidos como una interacción entre el ser humano y la naturaleza.
La construcción de H700 destronará en su categoría a la Torre Shanghai (632m), que dejará de ser el edificio más alto de China. Pero también a otra propuesta (de 680m) para el mismo barrio. Precisamente un paso elevado sobre la vía Shennan conectará ambos edificios.
Sus tres fachadas (ligeramente curvas) están delimitadas lateralmente por unos elementos lineales que recorren toda su longitud. Este aspecto enfatiza aún más su verticalidad. Especialmente interesante es la «punta de diamante» con la que se ha rematado el proyecto. Este espacio acristalado tiene varios niveles, y seguro que proporcionará buenas panorámicas sobre la ciudad.
El proyecto para la torre H700 fue diseñado por la firma de arquitectos bKL Architecture, y promovido por Kingkey Group.