Bjarke Ingels es un arquitecto danés con bastante don de palabra. Su proyectos los vende con dibujos sencillos que hasta el mismísimo Bart Simpson entendería. Con esas virtudes, no debiera extrañar a nadie que convenciera al hijo menor del magnate Rupert Murdoch. ¿El propósito?: tirar a la basura el proyecto que Norman Foster tenía para la Two World Trade Center de Nueva York. Parece broma, pero en Wired incluso contaron con pelos y señales todo lo ocurrido con este proyecto del Bajo Manhattan. Recordemos que es uno de los rascacielos emblemáticos para la reconstrucción de la Zona Cero.
BIG también lo hizo público, y no solo dio a conocer imágenes renderizadas de cómo se verá el área con el nuevo diseño de la WTC2, sino que hasta el mismísimo Bjarke aparece en un vídeo (más abajo) explicando por qué su proyecto para esa zona de la ciudad es «lo más». Para ello se ha basado en la idea de que su edificio tiene que unir el paisaje urbano de TriBeCa con los altos edificios del Lower Manhattan. Y es que lo que antes era un antiguo distrito industrial se ha convertido en un barrio de moda (TriBeCa), con apartamentos, lofts, y jardines en terrazas, donde todo el mundo quiere vivir.
El diseño del WTC2 de BIG
La torre de BIG desde ciertos ángulos se percibe como un edificio formado por siete bloques apilados, dejando siete terrazas ajardinadas. Pero también como un rascacielos liso de vidrio. En resumidas cuentas, el proyecto no es más que otra de las infantiles ideas que Bjarke logró hacer realidad. Se hubiera entendido mejor este cambio de diseño si la propuesta hubiera sido más radical. Por ejemplo colocando multitud de terrazas con jardines, y/o con fachadas revestidas de vidrio fotovoltaico; o algo que de verdad hiciera honor a las víctimas del atentado, etc… Lo sentimos Bjarke, pero tu WTC2 nos parece un mojón más.
El despido de Foster se vino gestando desde que Larry Silverstein (propietario de las destruidas Torres Gemelas) propusiera parte de la superficie de la Torre 2 a James Murdoch. Se quería instalar en la mitad del rascacielos los estudios y oficinas de la 21st Century Fox y News Corporation. Pero había un problema: según James, el proyecto de Foster era «más apropiado para un banco que para una moderna compañía de medios de comunicación«. La siguiente parte no cuesta mucho imaginársela, sobre todo si tenemos en cuenta lo primero que le dijo Bjarke a James:
No quiero construir una torre, sino un lugar de trabajo más integrado, donde fluye el espacio más fácilmente y la gente tiende más a colaborar.
Dicho rascacielos dará la bienvenida al público con un atrio de 12 metros, y alcanzará una altura total de 80 plantas (408 metros). La primera mitad estará ocupada por las compañías de Murdoch, y el resto será arrendado por Silverstein a varios inquilinos.
En el momento de publicar este post, el estado actual de la Zona Cero es el que sigue: la One World Trade Center ya está terminada y con su observatorio recientemente inaugurado; la Torre 3 ya tiene la financiación para ser construida (es el proyecto de Richard Rogers); la Torre 4 (de Fumihiko Maki) se terminó en el 2013. La Torre 2 es la que ha sufrido ahora este dramático cambio.
Imágenes del sitio web de BIG.