El proyecto de esta vivienda está situado en Melbourne (Australia). Surgió del cambio integral que se le hizo a una casa de la década de 1970, de una sola planta. Aquel edificio tenía una disposición demasiado ancha, y con poca luz natural en el centro. Por petición de los propietarios, la nueva casa se abre al norte, a un jardín con piscina y palmeras. Posee muchas posibilidades para el entretenimiento, en un ambiente que recuerda bastante al de un hotel. De ahí que tambien a esta vivienda se la conozca con el nombre de Resort House.
Esa disposición hace que el fondo de la parcela se presente como un ‘oasis’ con espacio para tumbonas, comedor y duchas al aire libre. Está lleno de comodidades y lujo. Unos pasos exteriores laterales sirven para dar ventilación e iluminación a diversas estancias, entre ellas un par de dormitorios; uno de ellos es el principal, el único que tiene cuarto de baño propio. Esta habitación recibe luz natural por el pequeño patio interior ajardinado que hay en la entrada. Resort House tiene más de un salón, pero se echa de menos que una casa tan grande no tenga la cocina independiente del resto. Se ha optado por compartirla con el comedor y uno de los salones. Toda la distribución interior se hace en tres crujías.
La entrada se realiza por la crujía central, dando a un espacio de doble altura que contiene la escalera principal de la casa. Esa escalera lleva a otros dos dormitorios (los de los hijos), con un distribuidor que funciona como un espacio de reunión. Hay otra sala conectada a una terraza, con vistas al jardín trasero, y accesible desde esa zona mediante una escalera de caracol.
Los arquitectos al final consiguieron lo que el cliente quería. Emplearon para ello mucha superficie acristalada, combinada con materiales como la madera, hormigón y la piedra natural.
Esta ampliación la realizó el equipo australiano de Bower Architecture. Fotos de Colin Page.
Muy bien logrado, no obstante la escalera caracol que debió ser reemplazada por otro elemento de circulaciòn vertical acorde con el nuevo estilo. Llora!