El estudio Maganom diseñó el Rascacielos 262 Fifth Avenue (Manhattan). Es un elegante y esbelto edificio, que integra otro de 12 pisos y fachada de piedra. Por su estructura y geometría, permite la configuración de apartamentos sin pilares en medio, y con ventanas de suelo a techo. Según la orientación, presenta diferentes fachadas. Posee un gran vacío en el tercio superior, y un espectacular mirador en la azotea.
El arquitecto Ben Herzog y el decorador Kevin Dumais ingeniaron un método para ocultar una tele en la pared del comedor de un apartamento de Tribeca, en NY. El trabajo consistió en aplicar un revestimiento con tablas de madera de nogal sobre una pared. En la parte inferior se le dio forma de un banco, y en la zona central se dejó un hueco donde colocar la pantalla de tv. Cuando no se utiliza, queda tapada por una trampilla.
Las habitaciones micro-suites del Hotel Arlo de Nueva York nos dan ideas para un dormitorio pequeño. La cama está encajada en una envolvente de madera. La habitación tiene poco más de 2 metros de anchura. En ese espacio está organizado el cuarto de baño, un escritorio, y la cama al fondo de la habitación, ocupando toda la anchura.
Kohn Pedersen Fox diseñó el proyecto para la torre One Vanderbilt, un rascacielos de 427m que será el segundo más alto de la ciudad de Nueva York. Sus 58 pisos están destinados a oficinas, en pleno centro de negocios de Manhattan. El edificio posee conexiones subterráneas con Terminal Grand Central.
El artista Rolf Bruggink diseñó World Trade Center, unas lámparas de piso que recuerdan a las Torres Gemelas de Manhattan, hechas a escala 1:180. La lámpara está formada por 7 piezas cúbicas, fabricadas en hierro fundido, que al apilarse forman la torre. Cada elemento lleva su luz, y puede servir como taburete o como mesita auxiliar.