Sam Hecht y Kim Colin diseñaron Busby W152, una Lámpara LED con USB para recargar dispositivos. Puede funcionar como lámpara de mesa o lámpara de pared. Este diseño puede estar integrado en otros muebles. Se fabrica en dos versiones de pantalla, y dos colores: negro y aluminio. Los 3 puertos reconocen los requisitos de carga de los dispositivos conectados.
Ron Arad creó la escultórica lámpara Spyre. Se trata de una lámpara de escritorio basada en una escultura que lleva el mismo nombre, para la RA de Londres. Solo se fabrican 50 unidades, a un precio que supera los 7 mil euros. Este diseño está formado por cinco piezas articuladas, fabricadas por impresión 3D. La lámpara está hecha en acero, aluminio, y plástico con acabado blanco mate. La fuente de luz es de tecnología LED.
Los diseñadores italianos Alberto & Francesco Meda crearon la lámpara de escritorio ALEDIN, para la conocida marca Kartell. El diseño es innovador, pues la electricidad llega a su fuente luminosa LED a través de su estructura de aluminio. La forma está conseguida con un cuerpo articulado de policarbonato transparente, disponible en varios colores. Hay una versión plana del cabezal, y otra con forma troncocónica.
El diseñador danés Tom Rossau creó TR7, unas lámparas modernas de techo que se distinguen por su alargada forma retorcida, creada con tiras de abedul. Existe una versión también de plástico, pero ambas de producen en dos tamaños (112 y 145cm), y tienen un diámetro de 25cm. También se fabrica en una versión de lámpara de pie, y en los mismos materiales, pero de 117 y 148 centímetros de altura.
Selección de las cinco mejores lámparas modernas que vimos en el 2015, la mayoría para colgar, y de tecnología LED, pero todas ellas de diseño deslumbrante. Cuatro de ellas son modelos de techo, y una está pensada para colocar sobre una mesa. La colección CIRCA es la más versátil de todas, ya que posee versiones de todo tipo.