La Torre 150 North Riverside de Chicago está resuelta con una estructura que transmite todas sus cargas hacia el núcleo central de su base. Tiene una altura de 54 pisos. Se construyó en un lugar que durante mucho tiempo estuvo vació, debido a su reducido tamaño, y proximidad de vías de ferrocarril y viaductos. La promotora compró parcelas adyacentes, y permisos aéreos para construir por encima de las vías férreas.