El arquitecto Mark Foster Gage propone un singular rascacielos gótico, con fachada de vidrio completada por grandes ornamentos tallados en piedra y bronce. Es una torre de 102 pisos de altura, con un uso residencial, que incluye vestíbulo en la planta 64, sala de eventos, restaurante, y tiendas. Todos los niveles son diferentes, y se remata con un majestuoso mirador.