Estos renders y dibujos son de un plan futurista para una ciudad de Malasia. Es toda una ciudad inteligente construida como si de una selva se tratara, imitando el ecosistema del bosque. Además tiene un funcionamiento sostenible y autosuficiente. ¿La ciudad ideal?
Plan futurista con skyline invertido
El plan abarca una extensión de 24 hectáreas, en unos terrenos ganados al mar, entre Malasia y Singapur. Hay que valorarlo por la forma sostenible que tiene de aprovechar los recursos naturales, pero también por su organización. Es muy sensible al medio ambiente, y crea ciudad con edificios que son auténticos bosques verticales.
Esta ciudad tiene una capacidad para acoger a 700.000 habitaciones. Incluye torres de oficinas, áreas residenciales con hoteles, además de centros comerciales y una escuela internacional. El parque está presente en toda su extensión, y de hecho se organiza alrededor de un vacío verde central. Este valle se extiende en cinco direcciones, representando la madera, fuego, tierra, metal, y agua.
Chris Bosse, jefe del equipo del proyecto, explicó lo siguiente:
El skyline de las ciudades suele tener el mismo aspecto. Por lo general se trata de un par de torres icónicas en el centro, rodeadas por multitud de edificios de menor calidad, y con un gran parecido entre todos ellos. Aquí hemos diseñado un skyline invertido de ciudad, donde el icono es un gran espacio público, no un objeto/edificio. Nuestro espacio central es un “valle”, basado en la ecuación Gente = Ciudad. Es decir, hemos ido de un objeto a un lugar.
Este desarrollo está diseñado para hacer funcionar sus procesos de reciclaje en un circuito cerrado. Todos ellos escondidos bajo tierra. Los materiales locales serían utilizados para la construcción, y la energía se generaría también localmente, haciendo uso de fuentes renovables.
El proyecto recibió el segundo premio en un concurso de ideas organizado por Forest City.
Una ciudad con circulación por capas
Este desarrollo pretender ser amigable con los peatones. Por eso tiene vías de transporte en diferentes niveles o capas. Están separados, de tal manera que el tráfico rodado circula en un plano inferior, el peatonal a un nivel intermedio, y el monorraíl por arriba.
Este proyecto de plan futurista fue realizado por los arquitectos de LAVA (Laboratory for Visionary Architecture).
